Existe un universo de criterios, cualitativos y cuantitativos, que pueden ser planteados y aplicados a la hora de elegir una carrera, pero hay interrogantes esenciales que deben ser resueltas antes de iniciar el análisis, entre ellas, las diferencias existentes entre carrera profesional y proyecto de vida, entre profesión y vocación.
La profesión se escoge desde el colegio, la Universidad y/o gracias al rumbo que va tomando la carrera profesional. Una profesión puede ser elegida sobre la base de las demandas de la familia, el ingreso, el Estado o la ubicación.
La vocación por su parte es “la necesidad de lograr un ideal, una satisfacción personal a través del ejercicio de la profesión que excede la conclusión de un trabajo”. Es el motor o la fuerza, que a su vez, puede tomar diversas formas y por lo tanto plantea distintos caminos.
Una profesión puede ser una vocación también y eso dependerá de un análisis más amplio que va más allá de una carrera profesional y que implique un proyecto de vida.
Es importante destacar que una decisión puede equilibrar estas dos variantes y también recordar que podemos ayudar e influir pero nunca manipular y elegir por ellos. Dejamos 6 consejos para guiar a los alumnos en este proceso.
#1 Muéstrales todas las opciones que puedas
Llévalos a hacer un deporte extremo, dales un paseo por museos, inscríbelos a clases de baile o de historia… procura que tus hijos tengan muchas experiencias distintas desde que son niños, para que a la hora de escoger su profesióntengan un panorama más completo.
#2 Pídeles que reflexionen sobre sus gustos… y habilidades
Es importante que escojan una carrera que les guste, pero también que tengan habilidades para esta. Si ama escribir más que las matemáticas, quizá la ingeniería no sea para tu hijo o hija.
#3 Contáctalos con alguien que trabaje en eso que les llama la atención
La mayoría de las guías de organizaciones especializadas en orientación vocacional incluyen este consejo. Busca a alguien que trabaje en lo que tu hijo o hija quieren y ponlos en contacto. Sugiérele las siguientes preguntas para su ‘mentor’:
- ¿Qué haces diariamente en tu trabajo?
- ¿Cómo elegiste esta profesión?
- ¿Qué tipo de entrenamiento necesitas para trabajar ahí?
- ¿Qué te gusta más de tu trabajo?
- ¿Qué no te gusta de tu trabajo?
#4 Búscales clases de prueba
Si tienes oportunidad, inscríbelos como oyentes o en algún curso o diplomado relacionado con la carrera que más les gusta; así se darán una mejor idea de lo que les espera.
#5 No les des razones egoístas
Procura guiarlos, no obligarlos. No porque tú estudiaste medicina significa que ellos tienen que ser doctores… quizá sus habilidades no son compatibles. Explorar todo lo anterior también te ayudará a ti a ver que lo que él o ella quieren no es tan mala idea.
#6 Deja que cometan sus propios errores, con responsabilidad
Dejarlos escoger su carrera sin intervenir más allá de ser una guía les permitirá hacerse responsables de sus decisiones actuales y del futuro. Eligiendo por ellos no les harás ningún bien. Infórmense juntos, pero déjalos equivocarse o acertar.